Académicos rindieron homenaje al Dr. Arístides Calvani

“La democracia hay que establecerla donde no existe, fortalecerla donde es débil y consolidarla donde ya está presente”-Arístides Calvani.

Con motivo del centenario del nacimiento  del Dr. Arístides Calvani, la Academia de Ciencias Políticas y Sociales convocó el pasado 30 de enero, a la celebración de un acto solemne en su honor. La conmemoración tuvo lugar en el Salón de Sesiones de la Academia de Ciencias Políticas  y Sociales en el  Palacio de las Academias. El evento contó con distinguidos Individuos de Número, así como también académicos  y familiares del Dr. Calvani.

Gabriel Ruan Santos, presidente de la Academia de Ciencias Políticas y sociales, fue el encargado de darle apertura al acto. Afirmó, en medio de una confesa admiración, que debía honrarse la memoria de los hombres honorables de la República y  describió con benevolencia el tipo de educación, que por convicción Calvani  impartió. “Una enseñanza práctica y actualizada del pensamiento, un método participativo dialogal y diría yo que mayeútico”, dijo.

Román Duque Corredor, quien preside la Comisión Conmemorativa del Centenario del nacimiento del Dr. Calvani, continuó el acto. «Tomo prestado de Tomás Polanco el adjetivo hombre de sabiduría para definir a Calvani como jurista y sociólogo y de Santo Tomás de Aquino, tomo la definición de sabio”, afirmó durante su discurso. 

Más tarde, Julio Rodríguez citó a Jacques Maritain para describir al homenajeado: “No basta ser piadoso, justo y santo para ser un buen político”.

El presidente del Instituto de Estudios Parlamentarios Fermín Toro, Ramón Guillermo Aveledo manifestó que: “Calvani, por cristiano, asumió el compromiso social y del compromiso social derivó la acción política como forma de hacer cosas para transformar”.

Por su parte, Oswaldo Páez-Pumar habló “de una visión de él como ser humano” y describió con detalle al  erudito hombre que una vez le dijo “es mejor cometer errores nuevos que repetir los viejos”

Pedro Pablo Calvani Abbo también expresó lo que “Arístides”, como en reiteradas ocasiones lo llamó, significaba para él. Entre lágrimas se refirió a su padre como un hombre de fe y un magnífico maestro. “Para él servir a los demás era el motor y su razón de ser”

El encargado de las palabras de clausura fue Eduardo Fernández, que afirmó “Me doy cuenta de lo importante de lo que estamos haciendo (…) porque lo más impresionante de Calvani es la vigencia de su pensamiento”. Así mismo presentó el Cuaderno N° 1 sobre el pensamiento y la obra de Arístides Calvani Discursos en la ONU y anunció la difusión de próximos ejemplares.

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